Welcome
Link Rápidos
Conectarse
temp: min 12° max 22°
awards
Mejor Personaje Femenino
------------
Mejor Personaje Masculino
------------
Mejor Pareja OnRol
------------
Mejor Roleador
------------
Mejores Amigos
------------
Mejores Enemigos
------------
Mejor User
------------
Últimos temas
licencia
No copies. Sé creativo!!
Se agradece a Weheartit, Tumblr, Imgur y Sourcecode por los recursos brindados para la realización de este foro
Una mala noche (Bryan Stanford )
3 participantes
Anaya City :: Downtown :: Hospital Mercy
Página 2 de 2.
Página 2 de 2. • 1, 2
Una mala noche (Bryan Stanford )
Recuerdo del primer mensaje :
Creo que era tan extraño que yo perteneciera a la familia a la que pertenecía que el día en que decidí ser una contadora en vez de felicitarme mis hermanas vieron mi elección de carrera como una muestra de rebeldía a todo lo que éramos, pero ellas jamás lograrían entender que para mi ese mundo de cosas sobrenaturales era nada mas que un pasatiempo de ellas y que mi interes solo estaba limitado a los libros y a la televisión. No recuerdo las veces que rodee los ojos frente a ellas por eso, quizás si ellas no criticaran tanto a mis novios, pero eso se evaporo cuando tocaron a mi puerta y me volví a concentrar en mi trabajo mientras Tammy entraba para darme unos documentos que tenía que ver urgentemente lo que haría que el trabajo que ya tenía retrasado sobre mi escritorio se retrasara mas.
No tenía que ponerme a pensar en cosas que no venían al caso, después de todo mi compromiso estaba roto gracias a mi gemela y todas mis hermanas estaban sintonizadas para darme concejos y sermones.
Cuando Tammy se fue solté un bufido y me puse a trabajar arrastrando las pocas neuronas que aun me querían funcionar, los números parecían querer engullirme y no tenía muchos ánimos para dar batalla este día.
Las horas habían pasado volando cuando al fin termine mi trabajo y al salir de la oficina vi que era tarde, de verdad tarde, había anochecido y todo, pero al menos me iba con la tranquilizadora sensación de mi trabajo cumplido, al menos todo parecía que iría bien hasta que intente encender mi auto y no funciono. Era increíble y yo de mecánica no entendía nada así que mientras me quedaba sentada mirando el volante como si él tuviera la respuesta a porque no arrancaba, sacando el teléfono de mi bolso solo para descubrir que la batería estaba muerta y eso era genial, hoy todo me sucedería. No tenía dinero suficiente para un taxi no habia recibido mi ultimo cheque y lo poco que tenia lo habia gastado en el almuerzo..
No había mas, salí del auto agradecida de mis zapatos bajos y mi ropa cómoda, cerrando el auto comencé mi caminara a casa, la noche estaba silenciosa y la luna brillaba en todo su esplendor, era algo gracioso lo que se me ocurrió después, porque si alguien quería asaltarme pues se llevaría un fiasco, sin dinero, un teléfono viejo y sin batería y nada de joyas, no era el mejor blanco esa noche, sin mencionar que era cinta negra en Aikido.
Creo que era tan extraño que yo perteneciera a la familia a la que pertenecía que el día en que decidí ser una contadora en vez de felicitarme mis hermanas vieron mi elección de carrera como una muestra de rebeldía a todo lo que éramos, pero ellas jamás lograrían entender que para mi ese mundo de cosas sobrenaturales era nada mas que un pasatiempo de ellas y que mi interes solo estaba limitado a los libros y a la televisión. No recuerdo las veces que rodee los ojos frente a ellas por eso, quizás si ellas no criticaran tanto a mis novios, pero eso se evaporo cuando tocaron a mi puerta y me volví a concentrar en mi trabajo mientras Tammy entraba para darme unos documentos que tenía que ver urgentemente lo que haría que el trabajo que ya tenía retrasado sobre mi escritorio se retrasara mas.
No tenía que ponerme a pensar en cosas que no venían al caso, después de todo mi compromiso estaba roto gracias a mi gemela y todas mis hermanas estaban sintonizadas para darme concejos y sermones.
Cuando Tammy se fue solté un bufido y me puse a trabajar arrastrando las pocas neuronas que aun me querían funcionar, los números parecían querer engullirme y no tenía muchos ánimos para dar batalla este día.
Las horas habían pasado volando cuando al fin termine mi trabajo y al salir de la oficina vi que era tarde, de verdad tarde, había anochecido y todo, pero al menos me iba con la tranquilizadora sensación de mi trabajo cumplido, al menos todo parecía que iría bien hasta que intente encender mi auto y no funciono. Era increíble y yo de mecánica no entendía nada así que mientras me quedaba sentada mirando el volante como si él tuviera la respuesta a porque no arrancaba, sacando el teléfono de mi bolso solo para descubrir que la batería estaba muerta y eso era genial, hoy todo me sucedería. No tenía dinero suficiente para un taxi no habia recibido mi ultimo cheque y lo poco que tenia lo habia gastado en el almuerzo..
No había mas, salí del auto agradecida de mis zapatos bajos y mi ropa cómoda, cerrando el auto comencé mi caminara a casa, la noche estaba silenciosa y la luna brillaba en todo su esplendor, era algo gracioso lo que se me ocurrió después, porque si alguien quería asaltarme pues se llevaría un fiasco, sin dinero, un teléfono viejo y sin batería y nada de joyas, no era el mejor blanco esa noche, sin mencionar que era cinta negra en Aikido.
Última edición por Amanda Deveraux el Miér Mar 06, 2013 1:33 am, editado 1 vez
Amanda Deveraux- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 27/02/2013
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Ahora nadaba en un mundo oscuro, era extraño aun oía voces, pero lejanas, aun no perdía la conciencia del todo y puse sentir unos brazos que me tomaban y me hacían flotar, era como estar sobre una nube, al menos esta vez no era el duro piso del hospital. Sabía que mi cuerpo no me respondería y mi conciencia se nublaba de a poco, aun así pude oírlo, era el… Te tengo pequeña... - Tranquila pequeña... te tengo... si era su voz.
Después todo desapareció, quizás había sido un sueño, una alucinación, la expresión de mi deseo porque sé que jamás el me llamaría de esa forma, no cuando significaría un gran problema en su trabajo.
Todo era oscuro y pesado, como si alguien me aprisionara contra la cama, estaba en una cama de nuevo, volvía de mi sueño, podía oír mi respiración, mi corazón latir y después se comenzaron a sumar otros sonidos, voces a mi alrededor, la voz de él estaba allí, luego ruidos de ruedas que rechinaban, eran molestos e hicieron que una nueva punzada de dolor se esparciera como un incendio.
Abrí los ojos asustada, no sabía dónde estaba, bueno si y no quería estar en ese lugar, como era que una vez mas estaba en esa camilla, aunque al menos no tenía esa bata poco decente.
Después todo desapareció, quizás había sido un sueño, una alucinación, la expresión de mi deseo porque sé que jamás el me llamaría de esa forma, no cuando significaría un gran problema en su trabajo.
Todo era oscuro y pesado, como si alguien me aprisionara contra la cama, estaba en una cama de nuevo, volvía de mi sueño, podía oír mi respiración, mi corazón latir y después se comenzaron a sumar otros sonidos, voces a mi alrededor, la voz de él estaba allí, luego ruidos de ruedas que rechinaban, eran molestos e hicieron que una nueva punzada de dolor se esparciera como un incendio.
Abrí los ojos asustada, no sabía dónde estaba, bueno si y no quería estar en ese lugar, como era que una vez mas estaba en esa camilla, aunque al menos no tenía esa bata poco decente.
Amanda Deveraux- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 27/02/2013
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
La giro sobre si misma con cuidado para poder examinar su herida, no entiendo como se ha puesto a sangrar ahora y no cuando se dio el golpe y entonces veo el por que de ello, la zona esta muy inflamada, tanto que la piel se ha desgarrado un poco y por eso sangra. Esta en muy mala zona, hay que bajar la inflamación lo antes posible, extraer la sangre acumulada en la zona.
Escucho a Jake decir que ya no soy el medico de Amanda y levanto la vista hacia el y veo su cara, su mirada suplicante y asiento aprobando lo que ha dicho con una pequeña sonrisa, por algún motivo no me gusta esa idea, pero se que el tiene razón, así que a regañadientes me incorporo separándome un paso de la cama.
- Es el medico de guardia esta noche, así que es su paciente. Hay que sacar esa sangre que presiona el cráneo y se que lo hará bien. Sera mejor que espere fuera, por favor, informeme lo antes posible.
Salgo de la habitación justo cuando entran las enfermeras con la camilla y me dirijo hacia la cafetería, necesito un café, necesito pensar en todo lo que ha pasado, pero no soy capaz de ordenar mis ideas, para eso es para lo que había salido a correr, pero hoy ni eso me ha salido bien.
Un par de cafés mas tarde y con las cosas menos claras aun miro mi reloj, tengo la reunión en unas cuatro horas pero no tengo nada de sueño, ya habrán acabado de hacerle las pruebas a Amanda así que mejor voy a su habitación, se que no debería, que ella no me quiere allí, pero no puedo separarme de ella, preocuparme, quiero saber que esta bien, que se pondrá bien y se que eso no tiene nada que ver con que haya sido el quien le causo la conmoción.
Cuando llego a la habitación, ella esta de nuevo en la cama, descansando, durmiendo... me acerco despacio a la cama y vuelvo a sentarme esperando que despierte la miro dormir y lo único que puedo pensar es que me pasaría toda la vida viendo como duerme.
Escucho a Jake decir que ya no soy el medico de Amanda y levanto la vista hacia el y veo su cara, su mirada suplicante y asiento aprobando lo que ha dicho con una pequeña sonrisa, por algún motivo no me gusta esa idea, pero se que el tiene razón, así que a regañadientes me incorporo separándome un paso de la cama.
- Es el medico de guardia esta noche, así que es su paciente. Hay que sacar esa sangre que presiona el cráneo y se que lo hará bien. Sera mejor que espere fuera, por favor, informeme lo antes posible.
Salgo de la habitación justo cuando entran las enfermeras con la camilla y me dirijo hacia la cafetería, necesito un café, necesito pensar en todo lo que ha pasado, pero no soy capaz de ordenar mis ideas, para eso es para lo que había salido a correr, pero hoy ni eso me ha salido bien.
Un par de cafés mas tarde y con las cosas menos claras aun miro mi reloj, tengo la reunión en unas cuatro horas pero no tengo nada de sueño, ya habrán acabado de hacerle las pruebas a Amanda así que mejor voy a su habitación, se que no debería, que ella no me quiere allí, pero no puedo separarme de ella, preocuparme, quiero saber que esta bien, que se pondrá bien y se que eso no tiene nada que ver con que haya sido el quien le causo la conmoción.
Cuando llego a la habitación, ella esta de nuevo en la cama, descansando, durmiendo... me acerco despacio a la cama y vuelvo a sentarme esperando que despierte la miro dormir y lo único que puedo pensar es que me pasaría toda la vida viendo como duerme.
Bryan Stanford- Jefe de Medicina Interna
- Mensajes : 99
Fecha de inscripción : 01/01/2012
Edad : 45
Localización : Si es urgente, siempre a mi busca.
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Al fin todo se quedo en silencio, podía decir que estaba calmada pero sabía que era algo mas, ahora estaba tranquila no sentía esa sensación en el estomago de antes como si supiera que estaba segura. Era extraño, estaba consciente, pero dormida a la vez, podía oír todo a mi alrededor y sentir las cosas, pero no podía abrir mis ojos, sentía mi respiración lenta, debía estar dormida pero quería despertar, quería irme a casa así que esforzándome abrí los ojos lentamente, la luz me molestaba y tuve que parpadear un poco antes de poder hacer foco y lo vi ahí estaba mirándome.
¿Era por esto que yo me sentía tan tranquila? No podía ser posible, digo mi mente y mi cuerpo no me harían esto, no después de lo que padecí con Cliff, no me harían querer algo que sabía que jamás tendría, pero que digo si seguro lo harían mostrarme hombres que eran mejores que Cliff y que para los cuales no existo.
Me lleve la mano a la cabeza, lo último que supe era que estaba tratando de irme y ahora una vez más con esa bata horrible, atada de nuevo a agujas y tubos, dios esto se volvía repetitivo y aburrido.
¿Cómo es que volví a la cama? No importa ya me iré no es para tanto, esto es mucho por un golpecito nada mas, mi hermana me ha dado palizas peores y sigo viva.
Mientras hablaba comenzaba a quitarme la intravenosa, aunque si me dolía la cabeza pero tenía que ser más fuerte y no dejar que me ataran a aquel lugar si después de todo no había sido nada más que un golpe ¿no?
¿Era por esto que yo me sentía tan tranquila? No podía ser posible, digo mi mente y mi cuerpo no me harían esto, no después de lo que padecí con Cliff, no me harían querer algo que sabía que jamás tendría, pero que digo si seguro lo harían mostrarme hombres que eran mejores que Cliff y que para los cuales no existo.
Me lleve la mano a la cabeza, lo último que supe era que estaba tratando de irme y ahora una vez más con esa bata horrible, atada de nuevo a agujas y tubos, dios esto se volvía repetitivo y aburrido.
¿Cómo es que volví a la cama? No importa ya me iré no es para tanto, esto es mucho por un golpecito nada mas, mi hermana me ha dado palizas peores y sigo viva.
Mientras hablaba comenzaba a quitarme la intravenosa, aunque si me dolía la cabeza pero tenía que ser más fuerte y no dejar que me ataran a aquel lugar si después de todo no había sido nada más que un golpe ¿no?
Amanda Deveraux- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 27/02/2013
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Jake vuelve al cabo de un rato informándome de que todo ha ido bien, pero que para estar seguros del todo tendría que estar un poco mas allí.
Después de un buen rato al fin empieza a dar señales de que despierta y yo me incorporo un poco en la silla y una pequeña sonrisa asoma a mis labios hasta que habla de nuevo, bueno, una cosa si es cierta, tiene la cabeza mas dura que he conocido en versión femenina.
Detengo su mano antes de que se quite la vía sujetándola con suavidad y firmeza a la vez.
- Sshh... Quieta, deja la vía donde esta. Estas de nuevo aquí porque te desmayaste, casi te vuelves a golpear la cabeza.
Explico mientras aparto su mano de la vía y la vuelvo a sujetar bien, volviendo a mirarla a los ojos sonriendo un poco.
- Aun no puedes irte, no te han dado el alta medica...
Después de un buen rato al fin empieza a dar señales de que despierta y yo me incorporo un poco en la silla y una pequeña sonrisa asoma a mis labios hasta que habla de nuevo, bueno, una cosa si es cierta, tiene la cabeza mas dura que he conocido en versión femenina.
Detengo su mano antes de que se quite la vía sujetándola con suavidad y firmeza a la vez.
- Sshh... Quieta, deja la vía donde esta. Estas de nuevo aquí porque te desmayaste, casi te vuelves a golpear la cabeza.
Explico mientras aparto su mano de la vía y la vuelvo a sujetar bien, volviendo a mirarla a los ojos sonriendo un poco.
- Aun no puedes irte, no te han dado el alta medica...
Bryan Stanford- Jefe de Medicina Interna
- Mensajes : 99
Fecha de inscripción : 01/01/2012
Edad : 45
Localización : Si es urgente, siempre a mi busca.
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Eso sin duda era parte de mi sueño, como era posible que se encontrara ahí cuidando de mí cuando yo podría arruinar su trabajo. Esto solo sumaba a mi camión de culpas que por cierto ya estaba pasando su cuota, aun así no pude evitar alegrarme de verlo, pero tenía que disimularlo, ya sabes que si una es muy obvia pues se iban corriendo como alma que lleva el diablo.
Luego fue la muerte, el me tomo de la mano y al instante el corazón comenzó a latir tan rápido que me asombraba que aun pudiera estar viva, pero lo que más pena me dio fue cuando el maldito monitor cardiaco comenzó a dar sus pitidos más altos a medida que marcaba el ritmo de mi corazón. Genial, porque esto no me pintaba un cartel en la frente que era obvio que me gustaba el hombre frente a mí.
Gracias… por no dejarme golpear el suelo esta vez aunque quizás te metas en problemas por estar aquí conmigo.
¿Qué tenía este hombre? Me sonreía de esa manera en que solo me hacia desear comerle la boca a besos, de recorrerle el cuello con mu lengua cual si fuera una paleta de mi sabor favorito, pero ya no podía seguir así, el se daría cuenta de mis pensamientos inapropiados y seguro se reiría de mi, un hombre así no está libre nunca y menos para alguien tan gris y aburrida como yo. [/color]
Luego fue la muerte, el me tomo de la mano y al instante el corazón comenzó a latir tan rápido que me asombraba que aun pudiera estar viva, pero lo que más pena me dio fue cuando el maldito monitor cardiaco comenzó a dar sus pitidos más altos a medida que marcaba el ritmo de mi corazón. Genial, porque esto no me pintaba un cartel en la frente que era obvio que me gustaba el hombre frente a mí.
Gracias… por no dejarme golpear el suelo esta vez aunque quizás te metas en problemas por estar aquí conmigo.
¿Qué tenía este hombre? Me sonreía de esa manera en que solo me hacia desear comerle la boca a besos, de recorrerle el cuello con mu lengua cual si fuera una paleta de mi sabor favorito, pero ya no podía seguir así, el se daría cuenta de mis pensamientos inapropiados y seguro se reiría de mi, un hombre así no está libre nunca y menos para alguien tan gris y aburrida como yo. [/color]
Amanda Deveraux- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 27/02/2013
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Podía sentir su corazón acelerado a través de su suave piel, podía ver como sus mejillas se encendían y no entendía el por que, tal vez porque el monitor cardíaco mostraba en todo momento sus latidos. Solté su mano para que su corazón y el monitor se calmaran y de paso el mio también, por que el mio también se había acelerado, por suerte ella no parecía haberse dado cuenta.
- ¿Problemas? A mi? No ¿Por que dices eso?
Pregunto mirándola con curiosidad y recostándome en la silla, mirándola a los ojos, aquellos hermosos ojos que me tenían atrapado. No podía ir mas allá con ella, no debía, no importaba que ya no fuera su medico, era simplemente que yo no era el mas adecuado ni para ella ni para nadie. Estaba casado con mi carrera, eso era lo que todos decían y era la verdad.
- ¿Como sientes la cabeza? Sigue doliéndote? Necesitas algo?
- ¿Problemas? A mi? No ¿Por que dices eso?
Pregunto mirándola con curiosidad y recostándome en la silla, mirándola a los ojos, aquellos hermosos ojos que me tenían atrapado. No podía ir mas allá con ella, no debía, no importaba que ya no fuera su medico, era simplemente que yo no era el mas adecuado ni para ella ni para nadie. Estaba casado con mi carrera, eso era lo que todos decían y era la verdad.
- ¿Como sientes la cabeza? Sigue doliéndote? Necesitas algo?
Bryan Stanford- Jefe de Medicina Interna
- Mensajes : 99
Fecha de inscripción : 01/01/2012
Edad : 45
Localización : Si es urgente, siempre a mi busca.
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Lo mire mientras el volvía a acomodarse en esa silla que no parecía para nada cómoda, pero lo que me generaba duda era el porqué seguiría aquí, bien podría irse y olvidarse de la chica loca con la que se encontró mientras hacia algo de ejercicio. Esto no podía ser solo culpa por un golpe, quizás había experimentado conmigo, una droga nueva por eso era necesario que estuviera llena de agujas.
Suspirando apoye la cabeza en la almohada sintiendo aun la mirada del fija en mi y no pude evitarlo, tuve que mirarlo lo que fue un grave error, digo uno más grave que sangras frente a él y demostrarme como una tonta, de seguro el concepto que debería tener de mi era que estaba lista para el pabellón psiquiátrico, en fin ya no podía arruinarlo más.
¿Pero que estaba diciendo? Si podía, a ver… podría hacerme del baño en cima, eructar de manera poco femenina, no sé que me de uno de los accesos de locura de mi familia y ver fantasmas o demonios, el cielo podía caerse sobre mí, estaba segura que en algún sitio había una catástrofe esperándome para el momento en que dijera que ya nada peor podría pasarme, porque si había una constante en el universo era que las cosas siempre pueden empeorar.
Y en problemas por ese abrazo que no debí darle, a veces se cuando actúo precipitadamente. Espero de verdad que no le cause problemas oí que el otro médico le decía que estaba mal. Mi cabeza está bien, duele un poco pero creo que ya pasara, de todos modos ya me han dado golpes y sé que no moriré
Lo tenía en la punta de la lengua, como decirle que se marchara cuando no quería que lo hiciera, sabía que estaba malditamente mal pero lo quería conmigo ahí y mordiéndome la lengua antes de decir algo incorrecto mire mi mano con la intravenosa y el tubo tranparente que contenía un hilo rojo, de sangre, de mi sangre que cuando quise quitarla hice que saliera. Sin duda las cosas podían empeorar y si lo estropeaba seguramente debería volver a Nueva Orleans.
Suspirando apoye la cabeza en la almohada sintiendo aun la mirada del fija en mi y no pude evitarlo, tuve que mirarlo lo que fue un grave error, digo uno más grave que sangras frente a él y demostrarme como una tonta, de seguro el concepto que debería tener de mi era que estaba lista para el pabellón psiquiátrico, en fin ya no podía arruinarlo más.
¿Pero que estaba diciendo? Si podía, a ver… podría hacerme del baño en cima, eructar de manera poco femenina, no sé que me de uno de los accesos de locura de mi familia y ver fantasmas o demonios, el cielo podía caerse sobre mí, estaba segura que en algún sitio había una catástrofe esperándome para el momento en que dijera que ya nada peor podría pasarme, porque si había una constante en el universo era que las cosas siempre pueden empeorar.
Y en problemas por ese abrazo que no debí darle, a veces se cuando actúo precipitadamente. Espero de verdad que no le cause problemas oí que el otro médico le decía que estaba mal. Mi cabeza está bien, duele un poco pero creo que ya pasara, de todos modos ya me han dado golpes y sé que no moriré
Lo tenía en la punta de la lengua, como decirle que se marchara cuando no quería que lo hiciera, sabía que estaba malditamente mal pero lo quería conmigo ahí y mordiéndome la lengua antes de decir algo incorrecto mire mi mano con la intravenosa y el tubo tranparente que contenía un hilo rojo, de sangre, de mi sangre que cuando quise quitarla hice que saliera. Sin duda las cosas podían empeorar y si lo estropeaba seguramente debería volver a Nueva Orleans.
Amanda Deveraux- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 27/02/2013
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
Le mire un poco sorprendido y luego me encogí de hombros moviendo una mano para quitarle importancia al tema.
- No te preocupes por eso, no tendré ningún problema, así que estate tranquila vale?
No quería que pensara mas en eso, se preocupaba demasiado por cosas que no la incumbían y no quería tener que explicarla que las palabras de Jake no eran tan solo por el abrazo, tenia que hacerla cambiar de tema.
- ¿Cuanto hace que vives en Anaya? El hilo de sangre es normal, no pasa nada.
Pregunte con curiosidad volviendo a atraer su atención hacia mi y haciendo que apartara la vista de la vía, no quería tener que volver a parar su mano de ella, tenia que estar tranquila y relajada, aunque no estaba muy seguro de que preguntarla cuanto llevaba sola en aquella ciudad fuera un buen cambio de tema.
- No te preocupes por eso, no tendré ningún problema, así que estate tranquila vale?
No quería que pensara mas en eso, se preocupaba demasiado por cosas que no la incumbían y no quería tener que explicarla que las palabras de Jake no eran tan solo por el abrazo, tenia que hacerla cambiar de tema.
- ¿Cuanto hace que vives en Anaya? El hilo de sangre es normal, no pasa nada.
Pregunte con curiosidad volviendo a atraer su atención hacia mi y haciendo que apartara la vista de la vía, no quería tener que volver a parar su mano de ella, tenia que estar tranquila y relajada, aunque no estaba muy seguro de que preguntarla cuanto llevaba sola en aquella ciudad fuera un buen cambio de tema.
Bryan Stanford- Jefe de Medicina Interna
- Mensajes : 99
Fecha de inscripción : 01/01/2012
Edad : 45
Localización : Si es urgente, siempre a mi busca.
Re: Una mala noche (Bryan Stanford )
¿Acaso mi suerte seria tanta como para que una metedura de pata mía no generara una gran avalancha de problemas a Bryan? La verdad ya comenzaba a dudar de todo, es que mirando más de cerca los hechos que se habían sucedido, era como si todo cósmicamente se hubiese alineado para que yo diera con este hombre, realmente guapo, que él me llevara por delante y que encima se dedicara a cuidarme cuando tenía el la posibilidad de irse a casa.
Podía sentir que el dolor de mi cabeza se iba lentamente, pero la sensación de la vía en mi brazo comenzaba a molestarme, creo que era el hecho de saber que una aguja me había perforado la piel y no la había sentido, mi miedo de no saber que sucede a mi alrededor, de no poder controlar las cosas y ser víctima del destino.
Mis ojos volvieron a su rostro, a recorrer ese rostro tallado sin duda por ángeles, porque ningún hombre común podría ser así de perfecto, y no sé porque se me antojo que el podría bien ser lar representación de Adonis, con esa belleza tan perfecta que haría que cualquiera muriera por poner sus manos encima. Luego salí de mi ensoñación tratando de recordar bien cuanto tiempo era el que llevaba en la ciudad. Quizás si antes me hubiese preguntado antes habría dicho el tiempo exacto con días, horas y minutos, pero en este momento poder coordinar mi pensamiento me estaba resultando un gran desafío y menos podría hablar como se debe así que tartamudeando le respondí.
Ya lle…llevo 5 meses, creo. No hace mucho que vine y aun estoy acostumbrándome a la ciudad y a mi trabajo. ¿Usted cuanto tiempo lleva aquí? ¿O es de esta ciudad? porque tiene un acento muy marcado.
Bien ahora si había quedado como una tonta, seguramente me enviarían a hacer mas tomografías y me mantendrían internada indeterminadamente. Era una posibilidad, como la que el saliera corriendo cuando tuviera un momento o yo fuera al baño, porque estoy segura que lo último que desea en este momento es estar con una tipa loca y que además habla raro.
Yo sabía que mantenía aun el acento de mi ciudad natal, era esa cadencia en mi hablar que hacía a todos preguntarme inmediatamente de donde era, al menos en casa era normal, aquí era un fenómeno del que se burlaban cuando pensaban que no estaba cerca. Pero como culparlos, si después de todo yo apenas había llegado a la ciudad, y sabia bien que tendría que pagar derecho de piso, lo único que ignoraba era cuanto tiempo tendría que soportarlo.
Podía sentir que el dolor de mi cabeza se iba lentamente, pero la sensación de la vía en mi brazo comenzaba a molestarme, creo que era el hecho de saber que una aguja me había perforado la piel y no la había sentido, mi miedo de no saber que sucede a mi alrededor, de no poder controlar las cosas y ser víctima del destino.
Mis ojos volvieron a su rostro, a recorrer ese rostro tallado sin duda por ángeles, porque ningún hombre común podría ser así de perfecto, y no sé porque se me antojo que el podría bien ser lar representación de Adonis, con esa belleza tan perfecta que haría que cualquiera muriera por poner sus manos encima. Luego salí de mi ensoñación tratando de recordar bien cuanto tiempo era el que llevaba en la ciudad. Quizás si antes me hubiese preguntado antes habría dicho el tiempo exacto con días, horas y minutos, pero en este momento poder coordinar mi pensamiento me estaba resultando un gran desafío y menos podría hablar como se debe así que tartamudeando le respondí.
Ya lle…llevo 5 meses, creo. No hace mucho que vine y aun estoy acostumbrándome a la ciudad y a mi trabajo. ¿Usted cuanto tiempo lleva aquí? ¿O es de esta ciudad? porque tiene un acento muy marcado.
Bien ahora si había quedado como una tonta, seguramente me enviarían a hacer mas tomografías y me mantendrían internada indeterminadamente. Era una posibilidad, como la que el saliera corriendo cuando tuviera un momento o yo fuera al baño, porque estoy segura que lo último que desea en este momento es estar con una tipa loca y que además habla raro.
Yo sabía que mantenía aun el acento de mi ciudad natal, era esa cadencia en mi hablar que hacía a todos preguntarme inmediatamente de donde era, al menos en casa era normal, aquí era un fenómeno del que se burlaban cuando pensaban que no estaba cerca. Pero como culparlos, si después de todo yo apenas había llegado a la ciudad, y sabia bien que tendría que pagar derecho de piso, lo único que ignoraba era cuanto tiempo tendría que soportarlo.
Amanda Deveraux- Mensajes : 30
Fecha de inscripción : 27/02/2013
Página 2 de 2. • 1, 2
Anaya City :: Downtown :: Hospital Mercy
Página 2 de 2.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Jue Jun 06, 2013 11:02 am por Victorie J. Adams
» Cabaret Gran Entrada ( Andrew J. W)
Lun Mayo 27, 2013 9:37 am por Rain M. Clarke
» Registro de Avatar
Lun Mayo 27, 2013 2:11 am por Rain M. Clarke
» ¿Juntos, pero no revueltos? (Sean Dylan)
Jue Mayo 23, 2013 6:45 pm por Elenna G. Stevens
» Ya diste el primer paso, no te detengas ||Damien Weiss||
Jue Mayo 16, 2013 10:01 pm por Victorie J. Adams
» Registro de Empleos
Sáb Mayo 04, 2013 8:08 pm por Elizabeth Beckett
» Registro de apellido.
Sáb Mayo 04, 2013 7:57 pm por Elizabeth Beckett
» Anne I. Wolff
Sáb Mayo 04, 2013 7:40 pm por Elizabeth Beckett
» Aclaraciones sobre The Master -leer y firmar-
Sáb Mayo 04, 2013 7:24 pm por Anne I. Wolff